Las plantas solares se han visto también afectadas por la lluvia de barro que está dejando la borrasca Celia. Un fenómeno atípico que ha llegado con una intensidad nada habitual, como reconocen en la empresa riojana de renovables Aresol, si bien los efectos a priori, dicen, no son destacables. Aunque su director comercial, Diego Luezas, tambié